La carne de cerdo por mucho tiempo ha sido estigmatizada con diversos mitos, en los que se planteaba que consumirla ocasionaba graves daños a la salud. Avances tecnológicos han logrado desestimar todas estas teorías, mostrando los modernos sistemas de crianza a los que está expuesto el ganado porcino y sus estrictos controles de seguridad, ofreciendo un producto sano y balanceado.
Hoy en Buenos Sabores, te queremos presentar 8 beneficios que debes conocer sobre el consumo de la carne de cerdo implementándola de forma adecuada en tu alimentación.
Aumento del colesterol y problemas cardíacos son algunas de las afecciones que se han vinculado al consumo de la carne de cerdo, catalogándola como un producto de alto riesgo para la salud con nutrientes inferiores a los requeridos. En la actualidad, diversos estudios han demostrado los beneficios que se puede obtener a través de esta carne, previniendo y controlando enfermedades de las que se consideraba responsable en un principio.
Beneficios del consumo de la carne de cerdo
- Vitamina B3: aporta enzimas que ayudan a mantener la piel y un sistema digestivo saludable.
- Vitamina B6: facilita la absorción de proteínas y fortalece el sistema inmunológico produciendo anticuerpos como mecanismo de defensa, además de intervenir para el funcionamiento óptimo del sistema nervioso.
- Vitamina B12: fortalece el sistema nervioso y previene la anemia megaloblástica.
- 9 aminoácidos esenciales: isoleucina, metionina, leucina, lisina, treonina, fenilalanina, valina y triptófano, son aminoácidos que permiten la absorción del calcio, la flexibilidad en los músculos y la producción de hormonas como (insulina, serotonina y adrenalina).
- Hierro: mineral necesario para el desarrollo del tejido conectivo y las hormonas durante la gestación y el crecimiento de los niños.
- Grasas monoinsaturadas: ideales para regular los niveles del LDL (colesterol malo) y ayuda a mejorar el HDL (colesterol bueno).
- Selenio: evita y reduce la posibilidad de padecer ciertos tipos de cáncer.
Omega 9: siendo un ácido graso que proporciona una actividad cardiovascular saludable.
Recomendaciones para el consumo de la carne de cerdo
De forma general la cocción en la carne de cerdo debe contar con los siguientes criterios:
- La carne de cerdo siempre debe estar cocida, evita el término medio.
- Al cocinarla en el sartén cerciórate de tener una temperatura media, para lograr una cocción dorada por fuera y jugosa por dentro.
- Marina con un poco de aceite de oliva y unas ramitas de romero para conservar su jugo y suavidad.
Las formas más comunes para preparar la carne de cerdo son:
- Hervida:
- Frita.
- A la parrilla.
- A la plancha.
Manteniendo en mayor o menor proporción las proteínas, sales minerales y vitaminas que contiene la carne.
Curiosidades sobre la carne de cerdo
¿Sabías qué?
- La carne de cerdo no es tan grasosa como se piensa y esto se debe a la estricta alimentación bajo la cual se encuentra este animal en el criadero.
- Los cortes más solicitados son de la zona interna como el lomo, pierna o espaldilla.
- Además de proteína, la carne de cerdo es capaz de proporcionar zinc, fósforo, potasio y otros nutrientes mencionados anteriormente.
- Se adapta perfectamente a una dieta balanceada, preparando en opciones horneadas, asadas o a la plancha.
- Aunque su aspecto es de color rosa esta es considerada una carne roja.
- Según la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, la carne de cerdo es la que más se consume a nivel mundial, representando el 36 % de la población.
En los últimos 20 años los métodos utilizados para la cría de carne de cerdo se han vuelto más saludables, mejorando la alimentación y conservación del ganado, convirtiéndola en una excelente opción para acompañar una dieta balanceada que proporciona los nutrientes necesarios al cuerpo. Encuentra tu opción favorita de cocción y los ingredientes adecuado para degustarla, ¡empieza a disfrutar los diversos cortes de carne de cerdo frescos y con la más alta calidad!